domingo, 20 de abril de 2008

¿Y yo porqué mierda me quedé?

Coincido con todo lo que dice ¿Claudia? abajo. Cuando terminaba la carrera, todos mis compañeros estaban pensando en becas para irse afuera. CHAN! Yo no quise, no pude, qué se yo.... creo que fue por el mate y los strippers. Para que no nos sintamos tan mal los que nos quedamos, algo que probablemente explique qué estamos haciendo acá (no es mío, aclaro).
El mate no es una bebida. Bueno, sí. Es un líquido y entra por la boca. Pero no es una bebida. En este país nadie toma mate porque tenga sed. Es más bien una costumbre, como rascarse.
El mate es exactamente lo contrario que la televisión: te hace
conversar si estás con alguien, y te hace pensar cuando estás solo.
Cuando llega alguien a tu casa la primera frase es
"hola" y la segunda "¿unos mates?".
Esto pasa en todas las casas. En la de los ricos y en la de los pobres.
Pasa entre mujeres charlatanas y chismosas, y pasa entre hombres serios o inmaduros.
Pasa entre los viejos de un geriátrico y entre los adolescentes
mientras estudian.
Es lo único que comparten los padres y los hijos sin discutir ni
echarse en cara.
Peronistas y radicales ceban mate sin preguntar. En verano y en invierno.
Es lo único en lo que nos parecemos las víctimas y los verdugos;
los buenos y los malos.
Cuando tenés un hijo, le empezás a dar mate cuando te pide. Se lo das tibiecito, con mucha azúcar, y se sienten grandes. Sentís un orgullo enorme cuando un esquenuncito de tu sangre empieza a chupar mate. Se te sale el corazón del cuerpo. Después ellos, con los años, elegirán si tomarlo amargo, dulce, muy caliente, tereré, con cáscara de naranja, con yuyos, con un chorrito de limón.
Cuando conocés a alguien por primera vez, te tomás unos mates. La gente pregunta, cuando no hay confianza: "¿Dulce o amargo?". El otro responde: "Como tomes vos".
Los teclados de Argentina tienen las letras llenas de yerba.
La yerba es lo único que hay siempre, en todas las casas. Siempre.
Con inflación, con hambre, con militares, con democracia, con
cualquiera de nuestras pestes y maldiciones eternas. Y si un día no hay yerba, un vecino tiene y te da. La yerba no se le niega a nadie.
Éste es el único país del mundo en donde la decisión de dejar de ser un chico y empezar a ser un hombre ocurre un día en particular.
Nada de pantalones largos, circuncisión, universidad o vivir lejos de los padres.
Acá empezamos a ser grandes el día que tenemos la necesidad de tomar por primera vez unos mates, solos. No es casualidad. No es porque sí. El día que un chico pone la pava al fuego y toma su primer mate sin que haya nadie en casa, en ese minuto, es que ha descubierto que tiene alma. O está muerto de miedo, o está muerto de amor, o algo: pero no es
un día cualquiera.
Ninguno de nosotros nos acordamos del día en que tomamos por primera vez un mate solo. Pero debe haber sido un día importante para cada uno. Por adentro hay revoluciones.
El sencillo mate es nada más y nada menos que una demostración de valores...
Es la solidaridad de bancar esos mates lavados porque la charla es buena. La charla, no el mate.
Es el respeto por los tiempos para hablar y escuchar, vos hablás mientras el otro toma y es la sinceridad para decir: ¡Basta, cambiá la yerba!".
Es el compañerismo hecho momento.
Es la sensibilidad al agua hirviendo.
Es el cariño para preguntar, estúpidamente, "¿está caliente, no?".
Es la modestia de quien ceba el mejor mate.
Es la generosidad de dar hasta el final.
Es la hospitalidad de la invitación.
Es la justicia de uno por uno.
Es la obligación de decir "gracias", al menos una vez al día.
Es la actitud ética, franca y leal de encontrarse sin mayores
pretensiones que compartir.
Tal vez ese sea el motivo por el que me quedé acá. Y por los strippers, obvio.

La Porto

10 comentarios:

cvidra dijo...

Portito, sabes que en Israel tomamos mate como alla?, los drusos son importadores de la yerba mate argentina aqui, asi que no solo los argentinos o uruguayos lo tomamos.
Nos sigue acompaniando en las reuniones o cuando estamos solos, asi que le damos al chupa chupa como alla.
Ahora eso de los strippers??, sera cuestion de adaptarlo aca, mientras tanto me tengo que conformar con mi peso pesado.

Silvia Frantz dijo...

Cuando quieras volvemos a tomar uns mates!!
Silvia

Liria dijo...

Obvio, el mate.
Y yo que fui (7 años, a USA, donde fui feliz), y me volví? Y nunca me quise ir de nuevo?
Mate había, allá, y tangos de Gardel para llorar hasta que uno ya no llora más.
Siempre me preguntan: ¿qué hacés aquí, por qué no te vas otra vez?
Porque me une el amor Y el espanto, porque allá no hay olor a jazmines ni a paraísos cuando llega la primavera.
Porque estando acá puedo pelearme con mi vieja más tranquila (por teléfono no me salía).
porque, en fin, aquí me quedaron los que ya no están.
Pero es como dice Jaime Roos: "el que se fue no es tan vivo/el que se fue no es tan gil".
Porto, Vidra: mi amor y mis respetos.

besos

Liria

Mónica Chachhi dijo...

Adri:
Tenemos la mayor corrupción, inseguridad, altibajos , los politicos más mentirosos.....pero comparto que junto con el mate tenemos el amor, el compañerismo y los afectos que en pocos lugares del mundo se pueden comparar.
Tomamos un matecito??? Nos da el pie para charlar, para elcanto , para la amistad !!!!
Tomamos un matecito ???

Mónica Ch.

Liria dijo...

Claro, Moni. Claro, Silvia. Porto, Vidra, vénganse que ya está el agua. Tomemos uno, dos, mil matecitos. Imaginen todas las pavas y los kilos de yerba que caben en treinta años.

un beso

Liria

Adri Porto Cohen dijo...

Pero obvio que tomamos unos matecitos! Ofrezco mi casa para cuando quieran ¿Les parece un fín de semana?

Liria dijo...

Por supuesto! Me encantaría, porque con el mate se llega a profundidas que ni con el alcohol.
Facuras o barritas de cereales light? Digo, habida cuenta del paso de los años y del avance de lípidos, fuerza de gravedad y esas cosas.

cecilia dijo...

vos si que sos grosa!
yo elijo tomar mate con vos a morir.
con o sin strippers.
te quiero,loca!
la bolocco.

Cristina dijo...

Chicas, es difícil irse, es difícil quedarse. Yo elegí quedarme, mi única hermana irse, hace años... Es un nudo que no tenemos resuelto,que tal vez no se pueda resolver, porque pasa al mismo tiempo por situaciones políticas y por coordenadas muy personales de cada uno, todo un tema. Pero sí podemos ir bajando la acumulación de pavas y yerba de Liria. Por qué no nos juntamos a tomar unos matecitos?
Un abrazo
Cristina

cvidra dijo...

cristina, me encanta como te abriste y participas... mi unico hermano vive en USA, mis padres fallecieron los dos, asi que te entiendo... claudia K